La Unidad de Prevención y Reacción de Madrid patrulla por las calles en prevención de la delincuencia. En mitad de la patrulla divisan a un par de hombres que han parado el coche en medio de la carretera. Uno está orinando en la misma calzada.

Bajan del coche policial y piden la documentación a los ocupantes. El conductor muestra evidentes signos de encontrarse bajo los efectos del alcohol, y el otro ocupante se opone a presentar su documentación. Se muestra agresivo y vacila a la policía.

Piden refuerzos, y llaman a la Policía Municipal para que realicen la prueba de alcoholemia al conductor. Descubren que el conductor tiene el carnet retirado por haber conducido bajos los efectos del alcohol con anterioridad.