El padre de un compañero de Carlos Léon, uno de los dos soldados que fallecieron ahogados en la base de Cerro Muriano (Córdoba), ha contado este martes en Más Vale Tarde que "la catástrofe estaba asegurada". Asimismo, ha asegurado que podría haber sido peor ya que algunos militares, entre ellos su hijo, ayudaron a sacar "alguno más del agua".

La familia del soldado ahogado ha anunciado que ampliará su denuncia contra el capitán y la extenderá a toda la cadena de mando y al Ministerio de Defensa. Sobre esto, el padre de un militar que participó en los mismos ejercicios, cuya identidad no ha querido desvelar, ha coincidido con lo que expuso el abogado respecto a la falta de medidas de seguridad y las condiciones que llevaron a este trágico desenlace.

"Mi hijo tiene una gran capacidad física, aun así, llegó exhausto", ha añadido, señalando que ni se imagina cómo serían esos ejercicios para una persona "con menos capacidad". Él es también militar y conoce bien estos ejercicios y lo que suponen si se hacen mal. "Las temperaturas del agua tan bajas agarrotan los músculos", ha explicado, sumando a eso el excesivo peso que llevaban los castigados.

Ha señalado que ha habido factores que han llevado a esta tragedia. Por un lado, que el equipo cuando se empapa, te tira a la baja y, por otro, no tenían dónde agarrarse. Por eso, cree que la "catástrofe estaba asegurada" y podía haber sido mayor si no fuera por la colaboración de los compañeros. "Mi hijo colaboró en sacar a algún compañero más del agua", ha detallado. "Lo más habitual en el Ejército es hacer las cosas bien", ha señalado, explicando que se trata de un caso excepcional. "Alguien no aplicó las medidas de seguridad. Esto hay que investigarlo", ha concluido.