La UCO y la Policía Científica han vuelto a registrar la casa de Manuela Chavero, cuatro años después de su desaparición en Monesterio, Badajoz.

Los especialistas ha hecho vídeos y foto y han tomado medidas tanto en el interior como el exterior de la vivienda. Además, han hecho una especie de reconstrucción de los hechos, recreando y grabando el recorrido que podría haber hecho Chavero de haberse subido a un vehículo la noche de su desaparición.

Este registro sirve a la familia para coger fuerzas y esperanzas mientras esperan encontrar a Manuela. Expediente Marlasca ha entrevistado a Emilia, la hermana de Manuela Chavero, que explica que no lo ha pasado peor en su vida.

Ella ha estado pendiente durante todo el registro. "No me lo podía creer, ha sido como una película. Nunca habían inspeccionado la casa así", ha asegurado.

Además, ha contado que toda la familia se encuentra en "tensión porque pueden detener a una persona de un momento a otro". "Esto está calentito y avanzado", ha explicado, mientras ha reiterado su confianza en los agentes que investigan el caso.

"Yo creo que a la UCO le ha llegado el golpe de suerte que estaba esperando", ha señalado. Emilia asegura que tras este nuevo registro tiene "mucho miedo de que puedan detener a una persona porque ya hable o haya una prueba".

Así fue la desaparición

Manuela Chavero desapareció en la noche del 5 de julio de 2016. En su casa no solo quedó el teléfono, sus llaves o su cartera, sino que las luces y la televisión también quedaron encendidas.

Los investigadores han estudiado en estos cuatro años a más de 100 sospechosos y varios vehículos. Además, se han realizado numerosas batidas de voluntarios que no han llevado a ninguna pista.

Chavero tenía 42 años cuando desapareció, estaba divorciada y con dos hijos, y hacía tiempo mantenía una relación con un joven, la última persona con la que se intercambió varios mensajes.