"Querido amigo, este no es un ejercicio fácil para mí, pero si no lo hago consideraré que traiciono mis principios, mis convicciones y mis sentimientos. Incluso cuando se ha alcanzado el poder mediante las armas luchando contra una tiranía, ese poder no nos pertenece": así arrancaba la carta manuscrita por el propio Felipe González para Fidel Castro.

El expresidente, que por aquel entonces gobernaba España, le explicaba al líder cubano su punto de vista sobre su poder en Cuba: "Debemos seguir dejándolo en las manos del pueblo, para no convertir nuestro trabajo en otra tiranía. Y siempre fracasará esa tiranía, aunque pensemos que sea sustituir lo malo por lo bueno". Puedes descubrir el texto completo en el vídeo principal de esta noticia, donde Felipe González reacciona a las palabras que él mismo escribió en 1990.