Los compañeros de Liarla Pardo han conseguido lo que parecía imposible: que Cristina Pardo, oriunda de Pamplona, rompa a llorar en la despedida de su programa.

Lo ha hecho cuando ha aparecido por sorpresa Javier Badules a cantarle una jota dedicada al programa: "Ahora que vas con Iñaki, las tardes a presentar, Cristina, en tu despedida, la jota no ha de faltar", ha cantado el jotero.

A lágrima viva, como se puede ver en el vídeo que acompaña estas líneas, la presentadora ha disfrutado de la canción en la que Badules reconoce el trabajo detrás de los 131 entregas, 200 invitados y más de 400 horas de directo que ha supuesto Liarla Pardo.

"Sin perder esa sonrisa has entrado en nuestras casas los domingos por la tarde", ha entonado el jotero.

La emotiva despedida de Cristina Pardo y Gonzalo Miró

"Te quiero mucho", le dice Cristina Pardo a Gonzalo Miró en su despedida durante el último programa de Liarla Pardo, un adiós en el que ambos, al borde de las lágrimas, se han dedicado unas bonitas palabras.

"Gonzalo vino a este programa a pesar de que no íbamos a hablar de su vida sentimental", bromea la periodista. El colaborador, que no ha fallado un solo programa, le devuelve las palabras a Pardo.

"Yo también te quiero un huevo. Me da mucha rabia que se acabe esto", asegura Miró, que se muestra abierto a volver con Pardo en su nueva etapa en Más Vale Tarde. Revive el emotivo momento en el vídeo que acompaña a esta noticia.

Gonzalo Miró ha sorprendido a Cristina Pardo trasladándose hasta la casa de sus padres para conocer los orígenes de la presentadora el último programa de Liarla Pardo. Javi, su padre, enseña dónde se ha criado Pardo: desde su casa de pequeña hasta el colegio. "Aquí es donde abría la ventana y se fumaba un cigarrito, pero ella lo negaba", recuerda entre risas su padre.

Gonzalo Miró también charla con Carmentxu Olóriz, profesora y tutora de Cristina Pardo en el colegio. "Hay dos palabras que me vienen a la cabeza cuando pienso en ella, risa y pasión", destaca la mujer, que afirma que Cristina tenía "una risa supersonora". Eso sí, también recuerda que no era obediente: "Nunca calificaría a Cristina Pardo de obediente". Además, Olóriz también sorprende a Gonzalo Miró enseñando varias fotografías de la presentadora de pequeña. Por último, Miró también charla con las amigas del colegio de Pardo. "Siempre ha sido así de guerrera, animada y ocurrente", destacan las amigas, que confiesan que nunca la han visto llorar.