Europa se prepara para una crisis energética sin precedentes y laSexta Clave ha analizado si en España estamos bien preparados, puesto que aquí no tenemos gas ni petróleo y debemos importar todo lo que necesitemos.

Lo cierto es que este petróleo que importamos viene en bruto, hay que refinarlo, y nuestro país tiene una de las industrias de refinado más potentes del mundo. Con el gas ocurre algo parecido: somos el país europeo con mayor capacidad de regasificación y de almacenamiento.

Entonces, aunque importamos todo el petróleo, exportamos el producto final, lo que hace que nuestro balance sea positivo. En datos, este mayo hemos importado 626 millones de toneladas de gasolina y diésel y hemos exportado 838 millones. Más de 200 millones de diferencia, así que somos autosuficientes en combustible.

Esta situación no siempre ha sido así. La tendencia cambió en 2012, que es la fecha desde la que siempre hemos exportado más que importado. La clave fue que en España el sector petrolero hizo una inversión millonaria entre 2008 y 2012 para ampliar y renovar sus refinerías con un total de 7.000 millones de euros. Por ello, ahora tenemos nueve refinerías en nuestro país que son capaces de producir gran variedad de productos petrolíferos y sobre todo son muy flexibles.

El país con más plantas regasificadoras de Europa

En cambio, con el gas el saldo entre importaciones y exportaciones no es positivo, pero sí es cierto que estamos cerca de exportar más que nunca. Concretamente, entre un 8 y 10% del gas que importamos lo reexportamos a toda Europa por dos vías: por mar enviamos buques con gas licuado y por gasoducto lo hacemos a través de Francia.

Esto se explica porque somos el país que más plantas regasificadoras (seis en total) tiene de Europa. Esto es más importante que nunca, porque estas plantas son las que convierten el gas licuado en gas apto para el consumo.

Además, el Ministerio de Transición Ecológica ha puesto en marcha los trámites para que la planta de El Musel empiece a operar como almacén, y esto es importante porque concentramos el 44% de la capacidad de almacenamiento de toda la Unión Europea.