¿Estamos en plena 'titulitis'?

Cada vez más titulados, cada vez más sobrecualificados: uno de cada tres españoles trabaja por debajo de su nivel formativo

La otra cara La universidad se ha convertido en la norma: el 41% de la población tiene estudios superiores, muy por encima de la media europea. Pero muchos acaban en empleos que no requieren carrera.

Cada vez más titulados, cada vez más sobrecualificados: uno de cada tres españoles trabaja por debajo de su nivel formativo

Ser político no exige una carrera universitaria. Ni para ser alcalde, ni para ser diputado, ni para ser ministro. De hecho, en España hemos tenido figuras muy relevantes en la política sin estudios superiores. Y no, no estamos hablando de casos aislados.

Celestino Corbacho fue ministro de Trabajo y no tenía carrera: su formación era la de profesional de comercio. José Blanco, ministro de Fomento con Zapatero, empezó Derecho, pero nunca la terminó. José Montilla fue ministro y president de la Generalitat de Cataluña sin pasar por la universidad. Cayo Lara llegó a coordinador general de Izquierda Unida siendo agricultor. Y Ada Colau fue alcaldesa de Barcelona sin haber podido acabar Filosofía, por motivos económicos.

Todos ellos estuvieron al frente de instituciones importantes. Todos sin título universitario. Y no pasó nada.

Pero cada vez es menos habitual

Hoy la mayoría de políticos sí tienen carrera. No porque sea obligatorio, sino porque forma parte del camino que la sociedad ya espera. La universidad se ha convertido en algo tan habitual que parece casi imprescindible para cualquier cosa. ¿Tenemos 'titulitis'? Un poco, sí.

En España, el 41% de la población entre 25 y 64 años tiene estudios superiores. Es mucho: estamos seis puntos por encima de la media de la Unión Europea. Y la cifra sigue creciendo.

Aunque hay menos jóvenes en edad universitaria, cada vez hay más matriculados. Este curso hay casi dos millones de universitarios en España, y cada año se gradúan unos 200.000. Son 40.000 menos que en 2014, que sigue siendo el año récord, pero sigue siendo una cifra muy alta.

¿Y todo eso se nota en el trabajo? Sí, pero...

La carrera ayuda. Y mucho. Los últimos datos del INE son claros: en 2023, el 83,7% de los titulados universitarios tenían trabajo. Y no solo trabajaban más, también cobraban más. De media, una persona con estudios superiores gana 27.101 euros al año, un 64,7% más que alguien sin estudios.

¿Entonces todo perfecto? No del todo. Porque España también tiene un problema de sobrecualificación: uno de cada tres trabajadores está en un puesto para el que está demasiado preparado. Es la tasa más alta de Europa. Mucha gente con carrera acaba trabajando en empleos que no requieren una.

¿Y la FP? También sube

Una alternativa que sigue ganando terreno es la Formación Profesional. Hoy ya hay más de un millón de estudiantes de FP en España. Pero no es que los estudiantes elijan entre FP o universidad: en realidad, lo que está ocurriendo es que cada vez más personas estudian más allá de lo obligatorio. Cada vez más formación, más preparación, más especialización.

No hace falta tener una carrera para ser político. Nunca lo fue, y no parece que vaya a serlo. Pero lo que sí está claro es que la sociedad va en dirección contraria: más titulaciones, más estudios, más exigencia… aunque luego el trabajo no siempre esté a la altura de ese currículum.