El pasado 15 de febrero se desvelaron los pagos del FC Barcelona a Negreira, quien fuera vicepresidente de los árbitros. Alrededor de siete millones de euros durante más de 17 años.

El objetivo de esos pagos, según el Barça, era que "todo fuese neutral". Desde Joan Gaspart y triplicándose con Joan Laporta como presidente del club azulgrana.

Laporta dio la cara 61 días después de que estallara el caso. Mostró en aquella rueda de prensa 43 CDs, informes técnicos y arbitrales realizados por el hijo de Negreira.

Hasta que el Juez ha concluido corrupción sistémica. "Señalan que no es creíble que el Barça realizara los pagos a Enríquez Negreira por los informes de asosarimiento arbitral", ha contado Alfonso Pérez Medina en la mañana de este jueves.

Han pasado 225 días y el caso sigue un curso complicado para el Barça.