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Rajoy e Irene Montero han entrado en un cuerpo a cuerpo. Después de la primera intervención de la diputada de Podemos encargada de defender la moción, el presidente del Gobierno ha salido a la tribuna de oradores para dejar patente la falta de apoyos parlamentarios de Podemos: “No me extraña que sus socios de Compromís les hayan pedido piadosamente que retirasen la moción de censura”.
Compromís, que concurrió a las elecciones junto a Podemos pero que decidió separarse después de su grupo parlamentario para incorporarse en el Mixto, apoya la moción de censura a Rajoy, pero creen que es mejor posponerla para cuando tenga apoyos parlamentarios suficientes.
En un comunicado, que recoge la rueda de prensa del grupo en el Congreso hace unas semanas, el partido le pide al PSOE “un gesto claro que exprese su predisposición abrir un proceso de diálogo” para apoyar la moción. Aunque “comparten los motivos de la moción”, aseguran que es necesario posponerla para presentarla de forma “calmada” y con una “mayoría sólida frente al Gobierno del PP”.
En definitiva, las declaraciones de Rajoy son una VERDAD A MEDIAS, porque Compromís no ha pedido retirar la moción de censura, ha pedido posponerla y presentarla cuando se tengan los apoyos suficientes para que salga adelante.