Sandra Sabatés entrevista a Blanca Manchón en 'Mujer tenía que ser'. Ha sido la regatista más joven en participar en unos Juegos Olímpicos, en Atenas 2004. Tenía 17 años y consiguió volver a casa con un diploma olímpico. Su carrera estaba en lo alto de la ola, pero en 2016 se quedó embarazada. ¿Qué pasó en ese momento?

Manchón explica que lo había comunicado a la Federación y a los patrocinadores: "Me decían que iba a ser una súper mami y que me deseaban toda la suerte del mundo. Pero cuando iban pasando los meses, tenía que llamar yo, les decía que no me llegaban los ingresos", confiesa la regatista.

En ese momento sintió una "dejadez absoluta". "No confiaban que iba a volver a competir al máximo nivel", reflexiona la deportista que explica que incluso alguno de los que habían sido sus patrocinadores dejaron de cogerle el teléfono: "Fue muy triste porque parar para ser madre y que se te penalice así, te da un bofetón de realidad de pensar que estamos un poco atrasados respecto a otros países".

"Se vende la mami 'fit', pero a las deportistas las tenemos escondidas hasta que vuelven a tener el resultado", denuncia Manchón.

Después del nacimiento de su hijo...

"Estaba muy feliz porque acababa de ser madre pero pensaba que había renunciado a mi carrera o que tenía que elegir", recuerda Manchón. Volver era tener que empezar de cero, sin el respaldo de la Federación: "No me decían el apoyo que iba a tener, a qué competiciones podía ir, no tenía entrenador..." relata la deportista.

Esta situación fue dura "mental y físicamente" para Manchón, pero gracias a su enorme fuerza de voluntad, siete meses después de dar a luz se convirtió en campeona de windsurf.

Eso marcó un antes y un después, consiguió sponsors y clasificarse para las Olimpiadas de Tokio. "Lo que más quiero hacer es disfrutarlo, me daría pena ponerme muy nerviosa después de todo lo que me ha costado", comenta Manchón.

"Que haya leyes y empresas que apoyen a las deportistas"

La windsurfista expresa su deseo de que las próximas deportistas que vayan a pasar por su misma situación de ser madres se encuentren con "leyes y ayudas".

"Las empresas se tienen que quitar el pensamiento de que una deportista embarazada es una deportista acabada. Se ha demostrado que volvemos, y volvemos más fuertes", y ella es, sin duda, un claro ejemplo de ello.