La sentencia de Estrasburgo sobre la Doctrina Parot ha provocado durante estos días un revuelo social y mediático en el país. Por ello Gonzo ha hablado con Carmen Hernández, viuda de un concejal del PP asesinado por ETA. Su singular punto de vista evidencia que dentro de las víctimas del terrorismo existe un espectro de sensibilidad mucho más amplio de lo que, en ocasiones, pudiera parecer.

Trece años después de perder a su marido, Carmen sigue viviendo en Durango y le confiesa a Gonzo haber vivido momentos de tensión entre sus vecinos, aunque asegura que eran un "mínimo número de ellos": "En la calle me dijeron: a tu marido le mataron por estar donde estaba. Eso me dolió muchísimo", explica.

Carmen pudo entrevistarse con un miembro de la banda terrorista, aunque no con la persona que asesinó a su marido: "Cuando le vi entrar me pareció tan joven... Al principio hubo mucho nerviosismo por los dos lados, luego le dije: 'Qué joven eres, podrías ser mi hijo'". Gonzo, escuchándole, le asegura que no le extrañaría que acabase dándole ánimos al etarra. Carmen confiesa que le llegó a dar un abrazo antes de marcharse: "Me dio mucha tristeza su vida, había vivido veinte años en la cárcel... Toda su juventud".

Carmen piensa que también hubiese querido estar con los asesinos de su marido, aunque no pudo ser ya que "murieron en Bolueta, llevaban un artefacto en el coche y explotó".

Gonzo también le pregunta sobre la sentencia que ha tumbado la Doctrina Parot, a lo que Carmen explica que "Si los jueces han dictaminado que es de ley que les corresponde salir, pues tendrán que salir".

La viuda del concejal asesinado por ETA asegura que el escenario que querría ver durante los próximos años es tener una convivencia en paz, "para ello hay que aprender todo lo que se ha hecho mal, para hacerlo bien. Pero esto creo que va a ser un proceso muy largo".