"De los aquí presentes es evidente que hay, como mínimo, dos o tres personas a las que les encantaría cambiar de trabajo, por estadística", asegura Alfonso Arús mientras observa con atención a sus colaboradores. Si hacemos caso a este estudio, que afirma que 1 de cada 3 españoles quiere cambiar de ocupación, el presentador no va desencaminado, pero nadie lo admite a la primera de cambio.

Marc Redondo solo se iría si consiguiera trabajo en la NASA y Hans Arús se marcharía si y solo si pasara a formar parte del gabinete de comunicación del Betis. Rocío Cano niega rotundamente que tenga intenciones de marcharse, pero a Patricia Benítez no tiene ni que preguntarle para que ella le diga exactamente lo que piensa al respecto.

"Yo lo que no quiero es trabajar. Yo lo que quiero es que me toque la lotería y dejar de trabajar. Pero no es un cambio de trabajo. Es no trabajar", recalca una y otra vez la tertuliana.