El Ayuntamiento de Barcelona ha anunciado un plan de cinco años que terminará con los pisos turísticos en la ciudad para que pasen a ser residenciales y así facilitar el acceso a la vivienda.

Antonio Maestre ha reaccionado en Al Rojo Vivo, destacando que le "parece bien" esta medida debido a que nos encontramos en un momento en el que "no está garantizado el derecho a la vivienda".

El periodista ha indicado que esto no se trata solo de particulares que decidan comprar una vivienda para destinarla a este fin, destacando que también se trata de que existen empresas que tienen este tipo de pisos.

Por ejemplo, el periodista ha explicado que en Madrid hay dos empresas "una tiene 251 viviendas en alquiler turístico y otra 247". Una situación que ha aclarado que genera tensión en ciertos espacios en los que hacen que "sea imposible poder acceder a la vivienda".

Sin embargo, aunque esta medida le parece bien, ha dejado claro que con esto solo "no se arregla ni cambia" el mercado de la vivienda.