El Índice de Precios de Consumo (IPC) subió un 0,8% en marzo en relación al mes anterior y elevó cuatro décimas su tasa interanual, hasta el 3,2%, debido al encarecimiento de la electricidad y los carburantes, según los datos avanzados este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Alejandro Inurrieta ha analizado estos datos en Al Rojo Vivo, destacando que hay dos factores diferentes en los que fijarse. Por un lado, una parte coyuntural que hace referencia al "repunte del IVA" cuando más bajo está el precio de la electricidad.

Por otra parte, hay un "efecto estructural" donde se ve reflejado cómo la subyacente, aunque está en tasas "más o menos razonables", refleja que la inflación acumulada en alimentos está "realmente desbocada".

Una situación que Inurrieta ha destacado que afecta, sobre todo, a las clases medias. Por tanto, el economista ha señalado que, en el contexto estructural, "tenemos un problema serio de inflación", especialmente para las clases más desfavorecidas.