Amoratado, con la cara hinchada y necesitando una muleta para poder caminar, así ha acabado Valentín después de que unos jóvenes le propinasen una brutal paliza por recriminarles que dejasen de hacer ruido en la calle.
"Me han roto la nariz", ha explicado este vecino de Ferrol (A Coruña), desvelando que también le han puesto varios puntos en la cara. Unas lesiones que ha sufrido por asomarse a la ventana y pedirle a una pareja, que en ese momento volvía de fiesta, que hiciese menos ruido. "Les dije que dejaran de pegar gritos y que fuesen a hacerlo a la casa de sus padres", ha señalado.
Ante esto, los jóvenes reaccionaron gritando más e insultándole. "La chica me empezó a insultar y yo tenía un vaso de agua y se lo lancé", ha admitido Valentín.
A partir de ese momento, comenzó la pesadilla. Los jóvenes rompieron la puerta de entrada, subieron las escaleras y comenzaron a golpear su puerta. "Simplemente abrí porque tenía la puerta casi encima", ha explicado. Valentín les preguntó que qué pasaba y en ese instante comenzó la paliza.
Golpes y gritos que resonaban en el portal. Ahora, la Policía está comprobando si las cámaras grabaron a los agresores.
Lo cierto es que los vecinos llevan tiempo quejándose de ruido. "Son riadas de gente", ha confesado una de estas personas. Una multitud que cuando acaba la fiesta en los locales, la continúa en la calle. "Vienen gritando y no se duerme ni los viernes ni los sábados", ha señalado otra vecina, reconociendo que es "horroroso".
Algunos vecinos reconocen que empiezan a tener miedo. La Policía, por el momento, sigue buscando a los autores de una paliza que va a ser difícil de olvidar.