La sequía de septiembre dejó lodos a la vista en el embalse del Eume. Supuestamente, restos de una antigua mina de carbón. Ahora, con la llegada de lluvias fuertes estos días pasados, el río baja gris. La turbidez es tan grande que en Pontedeume llevan desde el pasado sábado sin poder beber agua del grifo.
"La situación obliga a prohibir el consumo de agua, solo sirve para lavar y fregar", explica Bernardo Fernández, alcalde de Pontedeume. Aguas de Galicia ha instalado estas barreras anticontaminación pero, por ahora, con pocos resultados.
Los ecologistas exigen que la hidroeléctrica, dueña del embalse, retire esos lodos y evite más daños a la fauna, la flora y los vecinos. "Llevamos tiempo diciendo que ahí hay una serie de sedimentos muy tóxicos de sustancias que se permitían en la minería hace muchos años", apunta Miguel Rodríguez, de la asociación ecologista Adega.
Los vecinos se resignan a beber agua embotellada. La Xunta asegura a laSexta que ya le ha dado instrucciones a la empresa que explota el embalse para que solucione los problemas de turbidez del agua lo antes posible.
Uno de cada cuatro litros vendidos no declara impuesto
El fraude del IVA en las gasolineras le cuesta 1.000 millones de euros a Hacienda, el valor de 10 hospitales al año
El engaño lo realiza el intermediario que compra el combustible a las petroleras y que lo vende a las gasolineras cuando recauda el IVA que se paga al repostar. Cuando Hacienda lo reclama, la empresa desaparece.