El funeral del cantante Keith Flint se celebró este viernes en Bocking, Essex, Inglaterra. Los fans del cantante, procedentes incluso de Australia y Estados Unidos, acudieron al evento a despedir al que había sido la voz principal de la banda de música electrónica The Prodigy. Para homenajearlo, los asistentes realizaron una 'rave' al más puro estilo del artista, bebiendo y bailando sus canciones junto a una pila de motocicletas.

La muerte del cantante de 49 años tras su gira por Australia dejó desolados a sus fans, pues fue hallado colgado en su mansión de Essex. Una dura depresión tras la ruptura con su esposa pareció ser el detonante.

El funeral se realizó en la iglesia de St. Mary entre lágrimas de la viuda de Flint, la DJ Mayumi Kai. Asistieron a la ceremonia otras caras conocidas como Liam Howlett, el otro líder de Prodigy y su mujer, o Keith Palmer. La entrada de Cyrus en la ceremonia, el perro pastor del cantante, fue uno de los momentos más emotivos del momento.