El domingo, 16 de febrero, la autovía que une Salou con Tarragona, la C-31B, amaneció plagada de decenas de estorninos muertos.

Según el Grup d'Estudi i Protecció dels Ecosistemes Catalans-Ecologistes de Catalunya (GEPEC), los pájaros aparecieron junto al polígono sur de la petroquímica que sufrió una explosión hace unas semanas.

Ahora los agentes rurales de la conselleria de Agricultura Ganadería, Pesca y Alimentación investigan las causas del fallecimiento de estas aves. Y, según ha explicado Isabel Zubiaurre, responsable de meteorología de la Sexta, se barajan dos hipótesis.

A la espera de los resultados de los análisis, los agentes creen que la muerte se pudo producir por dos causas. Por un lado, que fueran electrocutados con el tendido eléctrico que se sitúa sobre las carreteras o que hayan sido atropellados.

Por su parte, desde el servicio de emergencias de Cataluña han informado que los agentes rurales procedieron a tomar muestras tras el hallazgo y están a la espera de los resultados de la necropsia para determinar la causa de la muerte.