Agricultores convocados por Unió de Pagesos (UP) han tomado con sus tractores las calles de Lleida, Tarragona y Vic (Barcelona) para exigir soluciones ante la actual situación de sequía.

Los manifestantes, a las puertas de la subdelegación de Gobierno, han lanzado ordenadores para denunciar la excesiva burocracia. También han lanzado huevos y han quemado estiércol. Aseguran que está en riesgo el futuro de sus explotaciones.

El coordinador de Unió de Pagesos (UP), Josep Sellart, ha leído un manifiesto ante la Subdelegación del Gobierno en Lleida, en el que el sindicato agrario asegura que "no permitiremos que un organismo de Estado como la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) trate a los regantes como súbditos, imponiendo decisiones sin transparencia ni participación".

En opinión de UP, la falta de planificación y la improvisación de la CHE han llevado a las recientes restricciones de riego en la cuenca del Segre y en la parte baja del Ebro.

Por ello, UP considera "imprescindible" que la CHE informe de la gestión que ha llevado a cabo de los recursos hídricos de la cuenca del Ebro y de los diversos sistemas que la integran y, en su caso, que el Estado asume las responsabilidades que se deriven.

En este sentido, y de seguir sin recibir respuestas y actuaciones, han anunciado que el próximo 16 de mayo protagonizarán una nueva tractorada, en esta ocasión, en Zaragoza. La marcha lenta de tractores en Lleida ha pasado por diversos puntos del centro de la ciudad y ha finalizado en la Subdelegación, donde han talado una morera muerta y han asegurado que tendrán que hacer lo mismo con los frutales si siguen sin poder regar.

Los agricultores también han pedido al Gobierno "medidas económicas urgentes" para poder sobrellevar esta "grave situación".

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