Los hechos ocurrieron de madrugada, cuando los mossos fueron avisados de que había un jabalí paseando tranquilamente por el casco urbano de Barcelona. Una vez localizado el animal, los agentes lo persiguieron por la calle hasta que pudieron abatirle.

Sin embargo, uno de los agentes que participaba en el dispositivo resultó herido en la rodilla tras recibir el impacto del disparo del compañero con un arma de corto alcance.

Para efectuar la operación tuvieron que utilizar sus armas reglamentarias, en lugar de rifles, que es lo común en estos casos.

Los mossos han abierto una investigación para aclarar lo sucedido esta madrugada, lo cual es habitual al haber utilizado un arma reglamentaria en acto de servicio.

Fuentes de la policía catalana han especificado que los agentes dispararon sus armas tras comprobar que no había personas en la zona, por el riesgo que podía suponer el jabalí para los transeúntes y el tráfico del lugar.