Las llamas han sorprendido a los vecinos de madrugada. El fuego ha comenzado en el tercer piso del bloque y en pocos minutos ha ido devorando los toldos hasta llegar a los pisos superiores. Han muerto dos vecinas, una del sexto y otra del séptimo piso, y otros 14 vecinos están heridos.

Ángel tuvo el tiempo justo para coger a sus tres hijos pequeños y su mujer y huir de las llamas. Desde su balcón se da cuenta de la suerte que corrió. El fuego llegó a escasos metros de su terraza.

Los vecinos explican que en el piso donde se ha declarado el incendio vivía una mujer con síndrome de Diogénes. Almacenaba tanto material combustible que las llamas se han propagado con gran virulencia.

Las 200 personas desalojadas han pasado la noche en un centro social, a la espera de que les dejen volver a sus casas.