La estampa floral más famosa de nuestro países la de los cerezos del Jerte, nuestros embajadores de la primavera, que año tras año llenan de turistas el valle del Jerte hasta que brotan sus frutos. "Es una experiencia única. Recomiendo a todo el mundo que venga a visitar esto", nos cuenta una turista.
El 'turismo floral' crece con rapidez en nuestro país, como los girasoles. Alguno de ellos ha sido adoptado por un japonés, y le gusta tanto que lo va a ver crecer a tiempo real desde su casa, e incluso cuando florezca irá a visitarlo. "Ya tenemos japoneses que quieren adoptar el campo de girasoles", afirma Luis Pérez, agricultor y creador de 'girasolesdecarmona.com'.
Y es que el amor de los asiáticos por los girasoles, no acaba ahí, porque según cuenta Paula Moreno, directora de Turismo de Carmona: "Estamos teniendo muchísima demanda, sobre todo del turismo asiático, que vienen muy interesados por los girasoles".
Ahora en España, las lavandas son las protagonistas. En julio comienza la fiesta de la lavanda, donde la alcarria tiñe sus campos de morado. Y a punto estamos de ver el Festival de los patios cordobeses.
Porque donde hay una flor hay un turista. Lo saben bien en Japón, donde se celebra un festival de luces en honor a los cerezos. O en Holanda, famosa por sus tulipanes de todos los colores. Las ciudades y campos se engalanan para dar la bienvenida a la primavera.
