Eran muchas las personas que esperaban ansiosas las vacaciones de Semana Santa. Sin embargo, los turistas que hayan escogido la costa de Huelva se han encontrado un panorama muy distinto: ni rastro de sol, y además con chiringuitos totalmente devastados. Precisamente, los principales perjudicados han sido los dueños de los restaurantes a pie de playa.

Un 40% de los chiringuitos en las zonas de la Antilla, El Portil o Matalascañas apenas están en pie. "Para nosotros es el comienzo, y lo que nos da fuerza y apoya al verano", lamenta Pedro José Cabrera, dueño de uno de estos locales. Todo, por culpa de los continuos temporales que han castigado la zona durante el mes de marzo.

Tampoco han salido bien parados los camareros, que se han quedado sin trabajo. "Hasta junio, de momento, no podemos empezar a trabajar", cuenta un desempleado. La reconstrucción a toda velocidad ya está en marcha. Ellos esperan que en Junio todo haya vuelto a la normalidad, porque estos días todos los están echando de menos.