La Sierra de Gata luce más triste que nunca. El incendio ha dejado a muchos agricultores sin su medio de vida, toca hacer valoración de los destrozos.

Luis es uno de los agricultores afectados. Las llamas han devorado su sueño desde hace años. Ahora se emociona cuando recuerda la ayuda recibida por sus vecinos: "lo han dado todo".

Entre monte y fincas particulares han ardido más de 7.500 hectáreas. Lo peor se lo lleva Acebo, donde ha ardido el 90% del término munincipal. Los ganaderos han sufrido grandes pérdidas. Fausto solo logró salvar a una treintena de ovejas y cabras. "No sé qué va apasar porque yo no tengo medios para reponer lo que he perdido", se lamenta.

El turismo rural también se ha visto afectado por el estado del paisaje. Los alcaldes ya han comenzado a reunirse con el gobierno extremeño para empezar con las ayudas.