Jordi, un niño fuerte y originario de Sant Feliu de Guíxols (Girona), había llegado a la casa rural de Can Serrallonga, en la comarca del Pla de l'Estany, con su familia y desapareció cuando sus allegados estaban descargando el coche.
A partir de ese momento, y a lo largo de la madrugada y la mañana, miembros de las agrupaciones de defensa forestal (ADF) y efectivos de Cruz Roja, bajo el comando de los Bomberos, han estado trabajando en su búsqueda. Los Mossos también han estado en la zona con las unidades de montaña, de subsuelo, de investigación, de seguridad ciudadana y de recursos operativos.