Tan sólo tres segundos separan esta imagen de la tragedia. Un edificio en demolición en Tafalla (Navarra) se derrumba antes de tiempo y, sin momentos posibles de reacción, se cae sobre la calle aledaña que estaba abierta al tráfico. El último vehículo acababa de pasar.

Afortunadamente, no ha habido heridos ni daños materiales, pero este derribo podría haber terminado en tragedia.

La demolición de la fachada de un edificio en ruinas, entre la calle Recoletas y la avenida de Estella del municipio navarro, ha dejado perplejos a los viandantes que observaban los trabajos de derribo. La fachada vence de manera inesperada unos instantes después de que una grúa trate de derribar otra pared.

Un perímetro de seguridad "correcto"

Según han informado la Policía Municipal de Tafalla, la empresa de demolición había perimetrado correctamente la zona, pero la resistencia de una de las columnas ha provocado que el conjunto de las ruinas terminaran desprendiéndose sobre la carretera.

Eso no ha evitado que la empresa emitiera un comunicado pidiendo disculpas en Facebook. "Que no cunda el pánico. El único responsable soy yo y asumo el error de no haber cortado el tráfico antes. Después de pasar el coche negro se han colocado dos operarios para cortar el tráfico, de testigo todas las personas que había en el lugar", arrancaba el responsable.

"El peso del mirador ha vencido la fachada y por suerte no ha pasado nada. Los municipales no tienen ninguna culpa de nada y como responsable de la empresa pido disculpas por el incidente". "Hemos tratado de limpiar la carretera lo más rápido posible con ayuda de la Policía Municipal para reanudar el tráfico".