La Guardia Civil ha detenido en la noche de este sábado a un hombre por su presunta implicación en la desaparición el pasado 12 de enero de Esther López, vecina de Traspinedo (Valladolid).

El sospechoso es una de las personas que reconoció haber estado con Esther la noche de su desaparición. La Guardia Civil está realizando un registro en el domicilio del detenido, que se encuentra aproximadamente a un kilómetro de un restaurante cercano a donde se vio a Esther por última vez.

Están realizando una inspección minuciosa y detallada después de que su desaparición dejase de considerarse voluntaria. El registro podría prolongarse varios días, y el detenido tiene que estar presente en cada paso.

Según ha informado este domingo la Subdelegación del Gobierno en Valladolid, todas las hipótesis y las líneas de investigación continúan abiertas y "no es posible difundir ninguna información más por el momento".

La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil se ha incorporado a la investigación en las últimas horas y ha tomado las riendas en la búsqueda de Esther López, la referida mujer de Traspinedo desaparecida desde hace once días, a la que esperan localizar con vida. La investigación se mantiene bajo secreto de sumario para que no se vea entorpecida.

A partir de ahora no habrá batidas generalizadas, ya que pasarán a hacerse "selectivas", según informó ayer la subdelegación. No obstante, además de incorporarse un dron a la búsqueda, es posible que próximamente se sumen equipos acuáticos.

Los vecinos de la localidad, organizados por la Guardia Civil, habían participado esta semana en una búsqueda en la que también han participando perros adiestrados en el rastreo y detección de personas.

Esther López mide 1,65 y tiene el pelo largo y castaño, los ojos marrones y en el momento de su desaparición vestía un pantalón vaquero negro y una cazadora, según el cartel difundido por la Asociación SOSDesaparecidos.

Su aspecto podría haber cambiado

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