Zurito, corto, penalti o caña. Dependiendo de la comunidad autónoma a la que pertenezcamos, pedimos la cerveza con una palabra distinta. Lo que sí tienen en común todas estas denominaciones es que se refieren a una medida en desuso. El doble está ganándole terreno a la típica caña española.

En Madrid ya prácticamente no se sirve en terraza, pues los establecimientos buscan un ticket medio más alto, y la caña, al ser más pequeña que el doble, es más barata. Eso sí, su precio ha aumentado un 7% en el último año.

Pero las viejas costumbres no se pierden, y el consumo de cerveza no ha decaído, se ha transformado. La única diferencia es que ahora, cuando pedimos, es más común que nos sirvan dobles. Pero ojo, porque también son más caros en 2022 que en 2021. En concreto, el precio del doble ha subido un 12% en los últimos doce meses.