Dos hermanos de la localidad valenciana de Cheste han sido condenados a un año de internamiento cada uno por torturar a un chico de 20 años para robarle en su vivienda.

Los dos, que eran menores cuando sucedieron los hechos en noviembre de 2019, se presentaron en casa de la víctima y le obligaron a quitarse los pantalones para someterle a torturas. Los agresores le propinaron golpes y le obligaron a bailar semidesnudo mientras se burlaban de él. Lo hicieron para cobrar una presunta deuda por drogas.

Los fuertes golpes hicieron que llegara a perder el conocimiento y, en ese momento, le arrojaron agua fría con un cubo para reanimarlo y seguir con la agresión.

Así siguieron con la tortura, esta vez con varias herramientas: le causaron heridas usando uno alicates y le provocaron daños en las piernas. "Vete a por algo que me duele la mano de tanto pegarle", le dijo un hermano a otro antes de utilizarlas.

Según informa 'Levante-EMV', la víctima denunció que grabaron toda la agresión con el móvil aunque este hecho no ha quedado acreditado puesto que no se hallaron esas imágenes en la investigación de la Guardia Civil.

El agredido se presentó ante la Guardia Civil de Cheste con graves heridas en las piernas, las manos y el rostro y denunció que esos hermanos le habían agredido brutalmente exigiéndole dinero.

La Fiscalía de menores solicitaba un año y medio de internamiento para cada uno, aunque tras llegar a un acuerdo de conformidad, el Juzgado de Menores les ha condenado a un año de internamiento por delitos de robo con violencia en grado de tentativa y lesiones. Al hermano mayor se le aplicará en régimen cerrado y el menor tendrá régimen semiabierto.

Además, el juez les impone una orden de alejamiento de la víctima de 200 metros de tres años y el pago de 6.000 euros por responsabilidad civil. Los dos menores, de origen búlgaro igual que la víctima, cuentan don varios antecedentes por robos con fuerza.