En una primera entrevista en el programa 'The Project' llegó la pregunta e incluso el periodista mostraba sus dudas al hacerla: "Tengo una pregunta y hoy hemos estado hablando sobre si se me permite o no plantearla. Muchas mujeres en Nueva Zelanda sienten que deben escoger entre tener hijos y tener una carrera o continuar su carrera... ¿Es una decisión que todavía tiene que tomar o que ya ha tomado", preguntó el presentador Jesse Mulligan a Ardern.

En esta ocasión, la candidata laborista confesaba entender la posición a la que se enfrentan muchas mujeres y aseguró que es injusto que esa decisión personal condiciones sus carreras profesionales."No tengo ningún problema con que se me pregunte esto porque he sido muy abierta hablando de un dilema al que probablemente se enfrentan muchas mujeres. Para mí, mi posición no es diferente de la de una mujer con tres trabajos. La decisión de tener hijos concierne a la mujer y no debería predeterminar sus oportunidades laborales", respondió Ardern.

Sin embargo en otra entrevista Jacinda Ardern respondió a Mark Richardson, presentador de un programa de radio, que le advirtió que los electores tenían derecho a saber si su potencial primera ministra pretendía tomarse la baja de maternidad en su mandato. "Si tienes una empresa necesitas conocer este tipo de información de la mujer a la que estás empleando", dijo Richardson.

"Es totalmente inaceptable en 2017 decir que se debe responder a esta pregunta en el lugar de trabajo. Es inaceptable", respondió. Y no es la única indignada, en el país son muchas las reacciones en contra de este tipo de preguntas a una mujer.

"El hecho de que una mujer quiera o no tener hijos no le importa a nadie", ha afirmado Jackie Blue, la comisaria de Derechos Humanos de Nueva Zelanda. Los medios y las redes no tardaron en incendiarse ante las preguntas sexistas hacia Jacinda Ardern, que sin embargo no se le hacen a los políticos hombres.