El juzgado de lo Penal número 15 de Madrid ha suspendido el juicio que arrancaba este martes a Borja Thyssen-Bornemisza y a su mujer, Blanca Cuesta, para quienes la Fiscalía pide 3 años de cárcel y un millón de euros de multa por un presunto fraude a Hacienda de 336.417 euros en 2010 a través de la transmisión de las participaciones sociales de su empresa en favor de otras sociedades holandesas.

Según fuentes jurídicas a laSexta, la defensa de ambos ha presentado un informe pericial que no conocían las partes y aún no hay fecha para que se retome.

De acuerdo el escrito de conclusiones provisionales de la Fiscalía, ambos declararon que en 2010 tuvieron una ganancia patrimonial de 2.206.527 euros por la venta de unas participaciones sociales, cuando la real, según el ministerio público, fue de 3.792.564 euros porque simularon que parte de la transacción correspondía a una sociedad que en realidad estaba inactiva, "ocultando por tanto a la Hacienda Pública la cantidad de 1.586.037,39 euros", y dejando de tributar 336.417 euros.

El 26 de febrero de 2010 tuvo lugar la venta de las participaciones de Cas Capetó S.L. por Borja Thyssen (titular del 50%), Blanca Cuesta (40%) y la sociedad Caribean Breeze S.L. (10%) a las holandesas Princess Four BV, Hermosa Beach Holding BV y Martínez Invesments B.V.

La Fiscalía explica que el activo de Cas Capetó S.L. estaba constituido fundamentalmente por una casa en Ibiza, que carecía de personal contratado y sin actividad económica, y que el precio total abonado por dicha operación ascendió a 9.700.000 euros, que fueron ingresados en la cuenta de la que era titular el acusado.

Ambos, que presentaron la declaración de la renta de 2010 en su modalidad de tributación conjunta, declararon que esa venta les dio una ganancia patrimonial de 2.206.527 euros, ocultando 1.586.037, según la Fiscalía, que sostiene que la ocultación procedería también de la venta de participaciones realizada a través de Caribean Breeze S.L., que es una "sociedad inactiva".

Para el ministerio público, la sociedad fue interpuesta por los acusados cuando adquirieron las participaciones de Cas Capetó S.L. en 2005, lo que constituyó, a su juicio, "un negocio jurídico simulado, siendo el verdadero negocio querido por las partes la adquisición por Borja Thyssen del 57% de esta mercantil y por parte de Blanca Cuesta el 43% restante".

Insiste en que ninguno de los dos lo tributó en 2010 "guiados por un ánimo de obtener un beneficio fiscal ilícito".