El buque oceanográfico 'Ángeles Alvariño' ha parado temporalmente sus trabajos de búsqueda de Tomás Gimeno por el fuerte viento en la zona. Ahora, el buque entra a puerto hasta poder retomar el rastreo y aprovecha las circunstancias para realizar un relevo de tripulación.

Según ha podido saber laSexta, el sábado por la noche y el domingo no han podido trabajar en la zona de búsqueda de Tomás Gimeno, debido a fuerte viento en la zona, pasando a buscar en la zona donde apareció el ancla y el cuerpo de Olivia, la pequeña de seis años. Esta madrugada han parado temporalmente la búsqueda por el fuerte viento y ahora atracan en puerto por motivos técnicos y cambio de tripulación.

El último hallazgo

Hace unos días el 'Ángeles Alvariño' localizaba en el fondo del mar dos pequeñas botellas de oxígeno pertenecientes a Tomás Gimeno, el padre de Anna y Olivia. Estas botellas darían una autonomía de apenas tres minutos cada una.

Esto refuerza la creencia de que el buque y la Guardia Civil están buscando en el sitio correcto. Además, la investigación sigue centrada en encontrar el cinturón de buceo de Gimeno. Creen que cada vez están más cerca de dar con él y tal vez con el cuerpo de Gimeno.

Y es que, estos últimos objetos han sido localizados a una profundidad de más de 1.500 metros, en el punto en el que se pierde la señal de móvil de Gimeno el pasado 28 de abril, precisamente en el mismo punto en el que estaban buscando los últimos días, a 5 o 6 millas de la costa. Un hallazgo que da aire a la investigación y a la tripulación del 'Ángeles Alvariño' que está optimista sobre encontrar nuevas pistas.

La familia, esperanzada

Joaquín Amills, portavoz de la familia de Beatriz Zimmermann, critica duramente a Tomás Gimeno, al que llama "cobarde", le reprocha "estar alejado de la sociedad" y muestra su esperanza en que encuentren el cuerpo.

"Hasta que no encontremos el cuerpo no vamos a estar tranquilos. Si es de esta forma como él acabó con su vida, el cuerpo tiene que estar en un radio alrededor de estas botellas. A esta profundidad, no hay nada que se desplace; debería de estar ahí", ha señalado a laSexta.

Dos meses de la desaparición

27 de abril. Tomás Gimeno llama a Beatriz, la madre de sus hijas, Anna y Olivia, y le dice que no las volverá a ver. Las cámaras de seguridad del Puerto de la Marina de Santa Cruz de Tenerife le graban subiendo a su embarcación.

En ella, subió los cuerpos de sus hijas, a las que "dio muerte", según el auto de la jueza, "envolviéndolas en toallas e introduciéndolas en bolsas de basura y éstas en bolsas de deporte". Gimeno se echó al mar y llegó hasta el punto en el que el buque Ángeles Alvariño encontró el cuerpo de Olivia.

Ya han pasado dos meses de ese fatídico día y hoy se mantiene la investigación, la búsqueda de los cuerpos de Anna y Gimeno para que la familia de Beatriz encuentre la paz después de un caso que ha conmocionado a un país.