La conocida como 'estafa de Microsoft' vuelve a ser tendencia por la facilidad de su ejecución y por las peligrosas consecuencias que tiene el que pueda llevarse a cabo. Pero ¿en qué consiste este timo? Tal y como ya recordaron en su momento desde la Oficina de Seguridad del Internauta (OSI), la estafa de Microsoft consiste en un "engaño bien estructurado" en el que los autores solo necesitan dos cosas, un teléfono y un ordenador: "Los ciberdelincuentes se hacen pasar por supuestos técnicos de Microsoft, ofreciendo falsos servicios de soporte técnico en nombre de esta compañía".

Para ello, llaman por teléfono -ojo, puede ser tanto al móvil como al fijo, si aún tenemos uno de estos aparatos en casa- y nos advierten de un importante fallo en nuestro sistema de seguridad digital que requiere de una intervención inmediata por parte de estos supuestos expertos. Este es, en resumidas cuentas, el proceso llevado a cabo por los ciberdelincuentes para acceder a tus datos personales.

Sin embargo, para evitar que puedan entrar en tus cuentas personales y usurpar tu identidad para la gestión de tus cuentas electrónicas o bancarias, te explicamos algunos ejemplos registrados por la OSI que pueden ayudarte a estar prevenidos si en alguna ocasión -esperemos que nunca suceda- te ves en una situación similar a la descrita a continuación.

Imagina estar en casa. Recibes una llamada por teléfono y tu interlocutor se identifica al otro lado de la línea como un servicio de soporte técnico (en otro escenario, pero con una finalidad similar, también puede aparecer un supuesto error en nuestro navegador web que incluya un número al que llamar para solucionar el problema). En cualquier caso, los estafadores intentarán llevar a cabo esta estafa dándole una apariencia profesional para hacernos creer que nuestros dispositivos están en peligro por hackeo.

"Al contestarla, los estafadores se identifican en inglés o español. Para dar mayor verosimilitud, es posible que se dirijan hacia nosotros por nuestro nombre o que ofrezcan alguna información sobre nuestro equipo", detalla la Oficina de Seguridad del Internauta. A partir de este punto, los ciberdelincuentes empezarán a darte una serie de instrucciones para, supuestamente, arreglar el problema. Para ello, pueden pedirte que ejecutes una serie de comandos o, directamente, que instales una aplicación. Ambos métodos con la finalidad de controlar de forma remota tu dispositivo.

Consecuencias y formas de evitar la estafa

¿Y qué consecuencias tiene esto? Pues desde la exposición de tu identidad y privacidad (fotografías, vídeos, documentos), con el consecuente robo de esta información para usarla como elemento de distorsión o para su venta a terceros, hasta la concesión de un acceso directo a diferentes cuentas de pago que puedas tener vinculadas al dispositivo que ha sido hackeado por los delincuentes. Desde la OSI recuerdan: "La magnitud del daño que puede causar este tipo de fraude depende de la información que proporcionemos y los recursos accesibles desde nuestro equipo".

¿Cómo evitamos esta estafa? La fórmula es sencilla. Primero, debes saber que Microsoft no se pondrá en ningún caso en contacto contigo salvo que tú, como usuario de un terminal con este sistema operativo, solicites una comunicación con el servicio técnico. Incluso con esa solicitud, la forma de contactar contigo será la mayoría de veces a través de correo. Si has confiado en esa alerta pero poco después te ha generado gran desconfianza, bastaría con cortar la conexión de la llamada.

Finalmente, si te has dado cuenta tarde de que has sido víctima de este tipo de estafa, la mejor opción siempre será reportar este problema a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. De esta manera, quizá no solo se acabe solucionando tu problema, sino que también puedes ayudar a frenar esta estafa para que no afecte a un gran número de personas. Este último paso es importante porque, como sucede con otros timos, la estafa de Microsoft vive repuntes de forma cíclica, y nunca está de más estar alerta.