Un grupo de simpatizantes del partido de extrema derecha España 2000 ha boicoteado un pase de 'Mientras dure la guerra', la nueva película de Alejandro Amenábar sobre la España de la Guerra Civil, en los Cines Lys de Valencia.

La proyección acababa de comenzar cuando varias personas se han levantado y han desplegado una bandera en la que se podía leer "Únete a la resistencia España 2000" al grito de "Viva España", "Viva Cristo Rey" o "España, una grande, libre".

Algunos de los espectadores llegaron a abandonar la sala de cine.

Desde España 2000 dicen que la película cuenta la historia de manera sesgada y manipulada.

Desde España 2000 afirman que 'Mientras dure la guerra' es "una película que cuenta la historia de forma sesgada, manipulada y llena de errores históricos".

El concejal de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Valencia, Aarón Cano, ha dicho que comentarios como los de Díaz Ayuso"son lo que fomentan este tipo de acciones". La presidenta de la Comunidad de Madrid, a raíz de la exhumación de Fanco, se preguntó si ahora "se quemarán las iglesias como en el 36".

Seis detenidos por "alteración del orden público"

Según ha asegurado la Policía Local de Valencia, tras los hechos, seis personas fueron denunciadas por "alteración del orden público".

Amenábar, sobre el boicot

Tras lo ocurrido en Valencia, el director de la película, en una entrevista a Canal Sur Radio, ha indicado que no le sorprende y ha añadido que "ya estaban tardando". "He visto anuncios de boicots contra la película que no han conseguido de momento nada [...] lo único que puedo hacer es agradecer a la gente que se está acercando a verla", ha añadido.

El director dice no estar soprendido por lo ocurrido en Valencia: "Ya estaban tardando".

Amenábar, que estuvo en laSexta Noche presentando 'Mientras dure la guerra', ya advirtió que "las heridas siguen abiertas y hay cosas por solucionar". A su juicio, "es bueno mirar sin miedo el pasado".

Desde los Cines Lys, donde se produjo todo, han emitido un comunicado lamentando el incidente y desmarcándose de estos actos "incívicos", que a su juicio "vulneran la libertad de las personas".

Los responsables de las instalaciones han mostrado su reconocimiento "al buen trabajo" de sus empleados y de las fuerzas del orden, que "atendieron inmediatamente a los afectados y fueron a comprobar lo sucedido", y han informado de que a los clientes que decidieron salir de la sala se les devolvió el importe de la entrada.