Después de un mes, el presidente de Cantabria, Juan Ignacio Diego, sigue sin querer hablar de quíen pagó y quién reservó su estancia en un balneario asturiano. En total, cuatro noches de lujo en 2010 en un hotel acompañado de su mujer y de su consejero de obras públicas. Una estancia pagada por Henri Laiño, directivo de Aquagest e implicado en el caso Pokemon. Tras descubrirse el escándalo, Ignacio Dieg, ha afirmado que fue él quien hizo la reserva en dicho hotel.

Ha declarado en el parlamento autonómico que "la reserva fue efectuada nueve días antes de ir al balneario, aportando como garantía de la misma una tarjeta de crédito".  Pero la investigación policial, determinó lo contrario, que fue el empresario quien reservó y también pagó su estancia. 

Dolores Gorostiaga, diputada del PSOE, denuncia que "hasta ahora se ha visto que el presidente está inmerso en una investigación judicial y ha mentido en el parlamento". La posible mentira en sede parlamentaria se une a la vía judicial. Diego está siendo investigado por el Supremo por un posible delito de cohecho cometido junto a su consejero de obras públicas.