Que no pase con Ciudadanos lo que pasó con Podemos. Según 'El Mundo', la estrategia de Génova es directa y tajante: minimizar el impacto del partido de Albert Rivera.
El PP sale al ataque contra la amenaza de Ciudadanos. Rivera no solo goza de buena imagen en los círculos empresariales, además el político mejor valorado por el electorado. De ahí que la cúpula de los populares haya dado orden de pasar al ataque. Ya sea criticando sus orígenes, dudando de su programa económicoo, o incluso, apelando a los partidos tradicionales.
Donde sí hay debate es en la ideología del partido, Ciudadanos no se posiciona ni a un lado ni a otro. "Somos constitucionalistas demócratas y progresistas, como dice el ideario", explicaba Albert Rivera. Donde no hay debate es en los sondeos, ya que Ciudadanos continua su ascenso meteórico y ya es la cuarta fuerza política.