Alberto González Amador, pareja de Isabel Díaz Ayuso, se dirigió formalmente al Ayuntamiento de Madrid el pasado 21 de marzo para intentar legalizar las obras realizadas en uno de los dos pisos que disfruta junto a la presidenta de la Comunidad de Madrid, según ha revelado 'elDiario.es'.

Este procedimiento para regularizar la situación de la vivienda, que al mismo tiempo reconoce la ilegalidad de las obras, se realizó un día después de que Más Madrid denunciara una "infracción urbanística" cometida por la pareja de Díaz Ayuso en la reforma de la casa.

Esa denuncia implicaba la visita de un inspector a la vivienda y que podría derivar en un procedimiento sancionador. Sin embargo, González Amador podría regularizar las obras ilegales antes de que se produjera la inspección y evitar así una posible sanción.

Además, estas últimas horas también se ha conocido que la querella que Alberto González Amador presentó contra la fiscal que lleva el caso del presunto fraude pasó por el ordenador de Miguel Ángel Rodríguez, mano derecha y asesor de Ayuso.

Es más, pocas horas después de presentar la querella, se reunió con el número dos de Ayuso, Alfonso Serrano, en un bar de Madrid. Un encuentro que Serrano defendía así: "Es noticia que me tome una Coca-Cola en un bar petado de gente"

Hechos de los que la presidenta trata de desvincularse: "La defensa de un particular no es mi responsabilidad".