Pablo Casado se acercaba por la espalda y sorprendía a Saénz de Santamaría mostrando que los candidatos a presidir el PP tienen buena sintonía ante las cámaras. "No puedo tener más que palabras favorables hacia ella, es una buena amiga", apuntaba Casado.

Cena del PP con sabor a tregua a nueve días para que los compromisarios del partido elijan líder. Casado echa sus cuentas asegurando que superna "los 2.000 compromisarios" y Sáenz de Santamaría cree que exagera: "Probablemente en este partido no sepamos sumar".

Sumar es lo que pretende la candidata, dice, pero sí o sí con ella a la cabeza: "Los afiliados se decidieron por mí y a mí me toca construir esa unidad". Una integración que no se va a producir antes del 23 de julio insiste Casado: "Después del Congreso yo me integraré con quién gane y posibilitaré la integración en mi candidatura".

Dentro compartieron mantel junto a Rafael Hernando y el propio PP ha facilitado imágenes de buen rollo entre los candidatos. Son varias las voces que piden en público integración y hay quien lamenta incluso que no se produzca ya.

Margallo, que dará su apoyo a Casado, dice que lo que toca ahora no es hacer una lista de integración: "Aquí de lo que se trata no es de unir personas, sino de escoger proyectos".

Los dos candidatos no hablaron en privado sobre las primarias. Eso lo harán, han dicho, pero esta cena -según las dos candidaturas- no era el lugar.