Diez meses después de su efímera etapa al frente del Ministerio de Cultura, Màxim Huerta ha reaparecido en una entrevista concedida a 'El País', en la que se ha sincerado sobre su nombramiento y su posterior dimisión, en apenas seis días: "Ha sido como una enfermedad, salvando las distancias: ha habido dolor físico, había y hay médicos y no encontraba salida".

Hasta ahora no ha querido hablar sobre su etapa como ministro y su salida del Gobierno, una experiencia que describe como "lo que más sufrimiento me ha generado", exceptuando el fallecimiento de su padre. Reconoce que lo pasó muy mal: "Me quedé solo en el despacho y lloré. Estaba roto".

En la entrevista, el ministro más breve de la democracia cuenta que Pedro Sánchez le llamó una mañana de manera inesperada y cómo aceptó el encargo de ocupar la cartera de Cultura en la misma conversación. "Recibo la llamada ahora y vuelvo a aceptar", afirma, y añade sobre la ilusión inicial que sintió que "solo pensaba en lo bonito que iba a ser".

Sin embargo, pronto se dio cuenta de que su papel no sería fácil. Denuncia los "prejuicios" de los que fue víctima, sobre todo por parte de los medios de comunicación: "Trataron mi nombramiento con un fondo de burla. Me di cuenta de que para algunos era un intruso", afirma, "aprendí esos días más del periodismo que de la política".

Menos de una semana después de ser nombrado, Huerta se veía obligado a dimitir tras salir a la luz sus problemas con Hacienda. "Al principio me rebelé, no quería irme. Reconozco que con un poco de apoyo por parte del Gobierno me habría quedado", relata, y desliza que "luego se ha visto que las varas de medir las tenemos de diferentes tamaños".

En este sentido, Màxim Huerta reconoce que fue muy doloroso para él cuando se publicó que Pedro Duque, ministro de Ciencia, tenía una sociedad patrimonial, supuestamente para evitar impuestos: "Tuve una crisis muy gorda. Vi la diferencia de trato, tanto de los medios como del Gobierno".

Tras meses de perfil bajo, ahora rompe su silencio, que, dice, "es la peor censura que tenemos".