El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha reprochado al Gobierno su "posición de dureza, basada en el 'ordeno y mando', y muy 'hard'" para oponerse a la consulta que se desea hacer en Cataluña, y la ha contrapuesto con los valores catalanes 'soft' basados "en el trato y el pacto".

El Gobierno ha hecho uso de su potestad de fijar criterio en el Congreso ante la proposición del Parlament que reclama para la Generalitat la competencia de convocar un referéndum en Cataluña y ha registrado un escrito en el que subraya que la consulta no cabe en la Constitución y que es "meramente especulativa".

En un acto institucional realizado este mediodía en el Palau de la Generalitat para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, el presidente Mas no se ha referido de forma explícita a este escrito enviado por el Gobierno central al Congreso, pero sí que ha hecho una referencia indirecta a la forma de actuar del Ejecutivo que preside Mariano Rajoy.

Según Mas, en la "dialéctica" entre los gobiernos español y catalán "estamos viendo un enfrentamiento entre dos sistemas de valores distintos", algo que según él se refleja en el proceso de convocatoria de la consulta soberanista catalana "con la reacción de Madrid, muy basada en el orgullo propio, en la dureza de la posición, en el 'ordeno y mando', muy 'hard'".

"En contraposición -ha añadido-, en Cataluña los valores están muy marcados por la forma de hacer durante muchos años de los comerciantes y la industria", que han determinado que siempre "se busque el trato y el pacto, que son valores muy 'soft'".

Después de indicar que está convencido de que las actitudes mantenidas durante siglos por las mujeres catalanas tienen mucho que ver con estos valores más "soft" que caracterizan la forma de hacer política que se tiene en Cataluña, Artur Mas ha querido dejar claro que "es la sociedad catalana" en su conjunto la que está "muy comprometida con el ejercicio del derecho a decidir su futuro".

Según el presidente de la Generalitat, "tenemos la oportunidad de construir un país nuevo, aunque somos un pueblo muy antiguo con una historia milenaria, pero ahora podemos renovar Cataluña" y "quizás este país pueda hacer una Constitución propia".

"¿Os imagináis que podamos hacer esto?", ha preguntado Mas al público asistente al acto, compuesto mayoritariamente por mujeres, antes de añadir que si Cataluña puede plasmar en su propia Constitución su "sistema de valores" y "sus raíces" puede encarar "un futuro con muchas oportunidades".