No muestra su identidad por miedo a una sanción. Pero este guardia civil no quiere dejar pasar la oportunidad de explicar lo que sucede en el seno de la agrupación de tráfico: “Los agentes necesitan hacer 40 o 50 multas como mínimo para no sentir el peligro de que se te pueda retirar el complemento salarial”.

Ese complemento salarial es de 142 euros mensuales y si no llegan a éste mínimo de multas se lo retiran. Hay un sistema, el llamado RAI, que valora la actuación de cada agente según el número de sanciones que imponen a los conductores pero ahora el Tribunal Superior de Justicia de Madrid lo ha declarado nulo.

José Antonio estuvo 25 años como guardia civil de tráfico: “El guardia civil sale hoy en día con una especie de multómetro en la cabeza”. Con el sistema RAI han pasado de la amonestación en el caso de las infracciones muy leves a la multa segura. Denuncian que se ha desvirtuado su labor en la carretera por un afán recaudatorio sin límites y temen que el Gobierno vuelva a imponerles otra norma que les ponga entre la espada y la pared.