Los cinco están citados a las 14:00 horas para comparecer por primera vez ante el juez de la Cámara del Consejo (tribunal de primera instancia) de Bruselas, que será el que decida si las órdenes europeas de detención (OEDE) dictadas por la titular del Juzgado Central de Instrucción número 3 deben ejecutarse.

Según han informado fuentes jurídicas, la Fiscalía de la capital belga ha reclamado a la magistrada información tanto penitenciaria como judicial, que según el ministro de Interiro, Juan Ignacio Zoido, ya ha sido enviada. Otras fuentes consultadas han concretado que, entre toda esa información, figuran datos sobre el estado de las cárceles españolas.

Lamela dictó el pasado 3 de noviembre órdenes europeas de detención contra el expresidente de la Generalitat y sus cuatro exconsejeros después de que un día antes no acudieran a declarar por su implicación en el desarrollo del proceso independentista.

Además de los tres delitos que les imputó según la querella del Ministerio Público, añadió también prevaricación y desobediencia para los huidos.

Puigdemont y sus exconsejeros comparecerán mañana conjuntamente ante el mismo juez, que instruirá el caso en neerlandés a petición de los acusados, que eligieron este idioma para todo el procedimiento en detrimento del francés.

El juez podría tomar una decisión el mismo viernes si considera que cuenta con toda la información necesaria para ello, aunque el escenario más probable apunta a que aplace su veredicto hasta estudiar las alegaciones presentadas por las partes. Los tiempos se alargarían también si alguna de las partes solicita más tiempo para preparar su argumentación y el juez lo autoriza.

Una vez se dicte sentencia sobre la entrega o no de los acusados a las autoridades españolas, la Fiscalía bruselense o las defensas de los cinco tendrán 24 horas para presentar recurso. Si esto ocurre, el caso se trasladará al Tribunal de Apelación.