En Gibraltar todo sigue igual. La prometida llamada de Mariano Rajoy al presidente de la Comisión Europea, Durao Barroso, aún no se ha producido. El único contacto ha sido entre Sorata Sáez de Santamaría y el viceprimer ministro británico, Nick Clegg.

Mientras, el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, exige contundencia para acabar con un problema heredado, “hay que actuar con contundencia. Estamos pagando las frivolidades de Zapatero, que concedió a Gibraltar la posición de tercer estado”.

Por otra parte, el eurodiputado británico William Dartmouth, miembro del ultraderechista Partido de la Independencia del Reino Unido, UKIP, ha propuesto que un miembro de la familia real visite Gibraltar para defender la soberanía de Londres sobre este territorio ymostrar el poderío de Reino Unido.

Pero donde más se sufre el conflicto es en la calle. La alcaldesa de la Línea de la Concepción, Gemma Araujo, pide una solución diplomática ya porque los mayores afectados, dice, son trabajadores y comerciantes españoles.

“Existen los cauces diplomáticos en la Unión Europea como para que no tengan que ser españoles y linenses los perjudicados por la política del Gobierno del PP en Madrid”, declaraciones que hizo en laSexta Noche.