Tras una larga lista de espera, Jessica es una de las pocas españolas que podrá votar en las próximas elecciones del 20D, y lo hará gracias a Pilar, una abstencionista convencida que cede su voto por solidaridad con los expatriados como su nieta. "Pero como van a gastarse 1.000 euros para votar, ¿estamos locos?", afirma Pilar.
El acuerdo forma parte de una iniciativa ciudadana que han logrado a través de la plataforma Marea Granate, que explica la campaña diciendo que "consiste en ceder tu voto a una persona que no pueda votar".
La idea, que se ha hecho viral en las redes sociales, ya ha conseguido 1.400 votos rescatados, porque sólo el 7,5% de los casi dos millones de expatriados podrán votar el próximo 20 de diciembre por las dificultades burocráticas tras la reforma electoral de 2011 aprobada por PP y PSOE.