La Policía australiana ha abatido a tiros en la ciudad de Melbourne a un hombre armado que había tomado a una mujer como rehén y después había disparado a tres agentes tras un enfrentamiento de más de una hora, y está investigando si existen vínculos con algún grupo terrorista.
Australia, firme aliada de Estados Unidos y su creciente campaña contra Daesh en Siria e Irak, está en alerta elevada desde los ataques perpetrados por milicianos criados en el país que regresan de combatir en Oriente Próximo.
Los agentes han recibido disparos en un edificio de apartamentos en la zona residencial de Brighton, según la Policía, que añadió que un segundo hombre había sido encontrado muerto por una herida de bala.
Según ha comunicado el vicecomisario Andrew Crisp a reporteros, la Policía estatal de Victoria llegó al edificio y trató de negociar con el hombre que se encontraba dentro después de que una mujer llamase a los servicios de emergencia alegando que estaba retenida como rehén.
Cuando las negociaciones fracasaron, el hombre salió y empezó a disparar a la Policía, hiriendo a tres agentes antes de ser abatido. "El terrorismo es una de las líneas de investigación", ha afirmado Crisp.
La Policía también está investigando el informe de una llamada telefónica a la redacción de un canal de televisión en la que se alegaba que el incidente estaba relacionado con Estado Islámico, ha precisado Crisp. Por el momento, la Policía no ha identificado ni al individuo que efectuó la llamada ni al atacante.
La mujer tomada como rehén fue rescatada, ha precisado Crisp, que ha puntualizado que los agentes heridos no se encuentran en estado grave.