El Papa Francisco volvió de nuevo a reiterar que "los obispos que habían acometido esas irresponsabilidades tendrán que hacerse cargo de ella y ya se verá cómo hacerlo". Una vez más, el pontífice reitera su "tolerancia cero" ante la "peste" de los abusos sexuales a menores en la Iglesia.

De este modo lo pronunció el Papa en la rueda de prensa celebrada a bordo del avión en el que regresaba de su viaje a Lisboa para participar en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ). Un reciente informe portugués desveló que en 70 años hubo hasta 4.800 casos de menores abusados por miembros de la Iglesia. Con algunas de estas víctimas se reunió el pontífice "de manera reservada en Lisboa" y dialogaron "sobre esta tremenda peste de la Iglesia"

"Me hace bien escuchar a las víctimas porque me hace que me haga cargo de este drama", afirmó el máximo cargo de la Iglesia. Igualmente, ha querido recordar que "el 42 % de los abusos a menores se da en el ambiente familiar y en los barrios y se cubren: hay que madurar para que se descubran", añade el Papa Francisco, asegurando a su vez que "desde que estalló el escándalo de la Iglesia en Boston sobre los abusos del clero "llegó un momento que se tomó consciencia de que no se podrían tomar caminos aleatorios" y que se "tenía que tomar el todo por las astas" y que desde entonces "hay una frase que se repite que es tolerancia cero".

"¿Por qué los homosexuales no? ¡Todos!"

También, en dicha rueda de prensa, se le ha preguntado también al pontífice si no es una incongruencia decir que la Iglesia está abierta a todos, cuando por ejemplo los homosexuales no pueden recibir todos los sacramentos: "La Iglesia está abierta a todos", ha asegurado el Papa; pero "luego hay leyes que regulan la vida dentro de la Iglesia".

Así, sostiene que "no puede realizar los sacramentos", lo que no significa que la Iglesia esté cerrada: "Cada uno encuentra a Dios a su manera dentro de la Iglesia", ha precisado. También ha querido puntualizar que las personas homosexuales también están dentro de ese "todos".

"Para esto hacer una pregunta: ¿por qué los homosexuales no? ¡Todos! Y el Señor es claro: enfermos, sanos, viejos y jóvenes, feos y hermosos, buenos y malos. Hay como una mirada que no entiende esta inserción de la Iglesia como madre y la piensa como una especie de compañía que para entrar hay que hacer esto, hacerlo de esta manera y no de otra", ha asegurado.

"El Mediterráneo es un cementerio", el Papa sobre la inmigración

A su vez, el Papa, también en dicha rueda de presa celebrada en ese avión de vuelta a Roma, desde Lisboa ha manifestado su opinión sobre la situación de la inmigración y de todas las personas que mueren en el Mediterráneo: "Es un cementerio, pero "el cementerio más grande es el norte de África" refiriéndose en concreto a la situación en el desierto entre Túnez y Libia, donde han sido abandonados migrantes para que murieran.

Ha asegurado que, por ello irá a Marsella: "La semana pasada, el presidente Macron me dijo que tiene la intención de venir a Marsella y estaré (allí) un día y medio", ha precisado el Pontífice, al tiempo que ha recomendado leer un pequeño libro, 'Hermanito', escrito por un migrante que llegó a España desde Guinea y que en el camino fue capturado, torturado y esclavizado.

Del mismo modo, el Papa Francisco ha alertado de que en el norte de África hay "campos de concentración", algo "terrible", señalando que la semana pasada la asociación 'Mediterranean Saving Humans' estaba realizando una labor de rescate de los migrantes que se encontraban en el desierto entre Túnez y Libia, "porque los habían dejado allí para que murieran".