El papa Francisco ha respaldado de lleno a Juan Pablo II, y asegura que ha sido objeto de conjeturas "ofensivas e infundadas". Francisco alude así a la polémica suscitada por unasdeclaraciones de Pietro Orlandi, hermano de la joven vaticana desaparecida a los 15 años en 1983. El caso está siendo investigado ahora de nuevo por el Vaticano.

"Seguro de interpretar los sentimientos de los fieles de todo el mundo, dirijo un pensamiento agradecido a la memoria de San Juan Pablo II, en estos días objeto de ofensivas e infundadas inferencias", ha expresado el pontífice tras el rezo dominical del Regina Coeli, que entre el domingo de Resurrección y el de Pentecostés sustituye al tradicional Ángelus.

Los miles de fieles reunidos en la plaza de San Pedro acogieron con un gran aplauso sus palabras, que se producen en medio de una fuerte polémica entre Orlandi y el Vaticano.

El hermano de la joven desaparecida ha realizado unas polémicas declaraciones en un programa de televisión en el que, entre cosas, insinuó que Juan Pablo II solía abandonar el Vaticano de noche con algunos obispos para buscar jóvenes en Roma.

En concreto, en la emisión, Orlandi, que desde siempre se bate por conocer el destino de su hermana y que esta semana ha declarado por primera vez ante el fiscal vaticano, aseguró que dentro del Vaticano se sabía que Juan Pablo II salía de sus muros a menudo con monseñores polacos y que hay quien refiere que "no iba precisamente a bendecir casas".

Tras estas afirmaciones, el diario oficial del Vaticano 'L'Osservatore Romano' tachó de "locura" las acusaciones de Orlandi, que calificó de "masacre mediática entristece y hiere el corazón de millones de creyentes y no creyentes", en palabras del director editorial del Dicasterio para la Comunicación de la Santa Sede, Andrea Tornielli.

¿Qué ocurrió con Emanuela Orlandi?

La polémica, que ha continuado en los últimos días con reproches cruzados entre la abogada de la familia Orlandi y el Vaticano, tiene que ver conuno de los grandes misterios de la historia italiana: la desaparición de Emanuela Orlandi.

Se trata del caso de una joven ciudadana vaticana, pues su padre era un empleado de la Santa Sede y vivía dentro de los muros vaticanos, que desapareció en el centro de Roma en junio de 1983.

El suceso, que ha vuelto a acaparar la atención tras el estreno del documental de Netflix 'Vatican Girl', fue relacionado en varias investigaciones periodísticas con el atentado contra Juan Pablo II en 1981 en la plaza de San Pedro a manos del terrorista Ali Agca.

Otras teorías es que pudo ser víctima de una red de pederastas o de la Banda della Magliana, la mafia de Roma de la década de los años 70 y 80, que habría actuado por orden del fallecido arzobispo estadounidense Paul Marcinkus, entonces director del IOR, el banco vaticano. Pero ninguna de las investigaciones ha arrojado resultados.