Patrick Thompson, un padre de 42 años residente en Arizona, EEUU, ha quemado vivo al perro de la familia en la barbacoa después de una riña con su hija, de 17 años, por llevar una camiseta que no le gustaba.
Según informa la Policía local, el hombre había estado fumando marihuana, y sufrió un episodio de alucinaciones. Los encargados de su detención dijeron que al llegar al lugar del suceso se encontraron a Patrick tirado en la acera y repitiendo: "El demonio me ha pedido que lo hiciera".