El apoyo popular a los 'chalecos amarillos' baja, y las posibilidades de que salga adelante la moción de censura son muy pocas, pero Macron no convence.

El pasado lunes, el Presidente de Francia decretaba un "estado de emergencia económica y social", para hacer frente a las protestas. Además, Macron anunció que subirá en 100 euros el salario mínimo y bajará los impuestos.

Sin embargo, las protestas no cesan. Los estudiantes franceses han bloqueado hoy, total o parcialmente, casi medio millar de institutos y los disturbios han continuado por todo el país. Todo, pese a las medidas sociales anunciadas.