Los cinco vagones y la locomotora del tren, que partió de Atenas cinco horas antes y llevaba 70 pasajeros a bordo, se salieron de las vías a apenas 200 metros de la estación de tren de la localidad norteña, situada a unos 30 kilómetros de Salónica.
La locomotora terminó empotrada en una casa cercana. El ministro de Infraestructuras, Jristos Spirtzis, coordinó las labores de los equipos de emergencia y rescate e instó a que se aclaren las circunstancias del descarrilamiento lo antes posible.
"Las causas de la tragedia deben ser investigadas de inmediato", dijo por su parte el gobernador de la región de Macedonia central, Apóstolos Tzitzikostas, al tiempo que señaló que la empresa encargada de las vías nunca había informado de ningún problema con la red.